El vídeo:
Jazztel (y III)
Bueno, después de que ayer El Teleoperador me enlazara, francisco me meneara, denunciemos hiciera un vídeo y lo colgara en YouTube… Vamos, que ayer fue un día muy largo y yo tenía la tarde ocupada. Así que paso a contar el resto de la historia (precedente 1 y precedente 2).
El lunes a primera hora esperaba tener alguna respuesta a mi correo electrónico… Pues no. Así que, tras grabar en el ordenador el mensaje me dispuse a llamar a las oficinas de Madrid de Jazztel para ver si alguien me podía explicar lo de los insultos.
Llamo a las 13:49 al teléfono que aparece en su web. Una secretaria de la centralita me dice, tras explicarle el asunto, que no puede pasarme con nadie. Como mucho puede pasarme con el teléfono de atención al cliente. Le explico que ya he llamado en varias ocasiones allí y que, como no soy cliente de Jazztel, no me atienden. Parece no entenderme y me repite nuevamente lo mismo. Le repito una vez más que no soy cliente y me dice que en ese caso he de llamar a 902. No estoy dispuesto a gastar mi dinero en una llamada a un teléfono de pago por un problema que me han generado ellos, y así se lo digo a esta mujer. Me dice: «Espere un momento». Y me pasa con el teléfono de antención al cliente.
Vuelvo a llamar. Le digo que me ha pasado con el teléfono de atención al cliente y que, como hemos hablado antes, no soy cliente y no puedo hacer nada allí. Me dice que no puede hacer otra cosa. Reitero mi deseo de hablar con alguien de dicha oficina. Finalmente acaba colgándome.
Llamo en unas cinco o seis ocasiones más en las que me cuelga. No contesta. Me pasa con la música de espera. Descuelga y me tiene varios minutos al habla hasta que cuelga… Una delicia de servicio, vamos. Todo esto quizás sea accesorio pero no está de más contarlo porque ésta no era una teleoperadora cansada de los clientes sino una secretaria de sus oficinas.
Como no hay manera de volver a contactar con dicha secretaria llamo al mismo número (que acaba en 000) pero cambiando el último 0 por un 1. Et voila, hablo con una persona (no sé de qué departamento ni con qué responsabilidad) que me dice que lamenta lo ocurrido y que le reenvíe a su dirección personal el correo electrónico que escribí el sábado a atención al cliente y que enseguida se pondrá en contacto con algún responsable para que me llamen y me expliquen lo sucedido.
A los pocos minutos recibo el correo del que hablo en la segunda parte de esta historieta. Un mensaje plano, automático, que no me dice nada nuevo. Escribo de nuevo a la persona con la que contacté y me responde rápidamente diciéndome que no me preocupe, que me llamarán, que el asunto es grave y que están investigando la procedencia de la llamada…
El lunes acabó así. Sin más noticias.
Pero ayer martes me llamó, según se identificó, el director general de plataformas comerciales de Jazztel. Evidentemente me pidió mil disculpas que acepté. No supo explicar más, claro. Tienen múltiples plataformas y call centers que hacen estas tareas y es un tanto difícil dar con la persona en cuestión que, según me dijo, sería despedida de inmediato. Cosa que a mi no me importa, es decir, que lo echen o no es lo de menos; el problema es otro más gordo. Y más de fondo.
Yo, básicamente, le dije esto: que iba a poner una denuncia en la oficina del consumidor (cosa que tengo en trámite), que me parecía una vergüenza la estrategia comercial de ir llamando a gente que no lo solicita y que lo que deberían hacer es mejorar la situación laboral de los teleoperadores e intentar salvar un poco la imagen de la empresa, si es que aún es posible. Y por supuesto le pedí que, por favor, no me llamaran más porque sus ofertas no me interesan.
Claro está que asentía y me daba la razón y se hacía cargo de lo que le contaba, pero bueno. Se puso a mi disposición, me informó de que mi número había sido marcado en sus bases de datos para no volver a molestarme y me dio su nombre y número de teléfono personal por si tenía algún otro problema con Jazztel me pusiera en contacto directo con él.
Voy a ver ahora si puedo poner la denuncia tranquilamente y seguir con mis cosas… Si es que no me llaman de nuevo.
Jazztel (II)
Bueno, he aquí el sonido tan esperado por algunos. He estado valorando hasta el último momento el hecho de subirlo o no hasta no tener noticias más serias de algún responsable de la empresa…
Pero parece que no será así. Ayer vi que a otros les han sucedido cosas similares (aunque creo que no con insultos tan fuertes como este caso) y que han tenido respuestas muy parecidas, sino comparen:
Así empieza el mensaje que enviaron a la persona del caso indicado arriba:
Estimado Sr. ??????? ?????:
En respuesta a su escrito, le rogamos acepte nuestras más sinceras disculpas y nuestro agradecimiento por la manera paciente y amable con que ha hecho llegar el asunto a nuestras manos.
[…]
Y así comienza el mensaje que me enviaron ayer después de diversas llamadas telefónicas:
Estimado Sr. ?????:
En respuesta a su escrito, le rogamos acepte nuestras más sinceras disculpas y nuestro agradecimiento por la manera paciente y amable con que ha hecho llegar el asunto a nuestras manos.
[…]
El resto del mensaje varía un poco… Pero parece una respuesta estándar.
Bueno, ahí va:
Jazztel (I)
Bueno, voy a empezar por el principio de la historia diciendo, de partida, que me gusta mucho el Jazz.
El sábado día 23 de febrero de 2008 (el sábado pasado) recibí una de tantas llamadas comerciales de Jazztel en la que me ofrecían su ADSL de 20 megas. Como muchos de vosotros, no es la primera vez que me llaman con proposiciones comerciales de estas a las que estamos sometidos simplemente por ser clientes de Telefónica, que le pasa nuestros datos a terceros con fines comerciales… Pero ése es otro tema.
El caso es que, como hago en otras ocasiones porque ya me sé la cantinela y ya he intentado disuadir a algún que otro teleoperador, colgué sin más dilación en cuanto entendí que era una de esas llamadas.
A los pocos minutos vuelve a sonar el teléfono. Veo en el visor aquello de Número Privado (ni siquiera se puede identificar desde dónde llaman…) y a sabiendas de que sería de nuevo la oferta de marras ni siquiera descuelgo. Y al teleoperador le salta el contestador automático, claro.
Ni siquiera le di importancia cuando el teléfono soltó ese timbre entrecortado que indica que hay un mensaje de voz… Un rato después fui a escucharlo.
Qué sorpresa al encontrarme que el operario de Jazztel (supongo que en última instancia es responsabilidad de Jazz Telecom este trabajador que habla en su nombre) me ha dejado un par de minutos plagados de insultos con marcado acento y vocabulario argentino en los que me llama de todo a mi. Y a mi madre, claro. Tras los insultos, además, como de chiste, me vuelve a vender el ADSL de 20 megas pero burlándose de mi («gallego estúpido»), del servicio («¡no existe un ADSL de 20 megas!») e insultándome de nuevo entre frase y frase.
Nota: Estoy intentando subir el audio a algún servidor para que esté disponible. De momento os dejo con la transcripción, aproximada porque el protagonista habla rápido y entrecortado, de las delicias que me dedica:
Mensaje número 1, recibido el día 23 de febrero a las 11 horas 56 minutos:
La reputa que te remil parió hijo de tres mil camionadas de porongas ardientes de guasca, mocha, puta, te entierro toda la verga en el orto, forro (?) chupavergas, chupapijas, culoroto, metete un poste de luz en la zanja del orto, la reputa que te remil parió, mamaverga, sí, como oiste: mamaverga. Che, loco, ¿querés comprar Jazztel? Son 28 € más 11 € de mantenimiento de línea, nada más, nada más, vas a tener lo que es ADSL de 20 megas, llamadas nacionales totalmente gratis de fijo a fijo las 24 horas del día, televisión (?) con 82 canales de base, sí, no te estoy mintiendo, 82 canales de base, loco, …, ¿Quién quiere 82 canales de base? ¿La concha de tu madre? Hijo de remil putas (?). ¿Un ADSL de 20 megas, boludo? No existe, yo sé que no existe, pero vos vas a tener, se te van a quedar 6 megas, como mucho… Nosotros te damos 20 y entre la bajada y lo que es televisión y lo que es teléfono e internet te quedan 2 megas, 1 mega como mucho, o sea una velocidad de la reputa madre, pero van (?) ustedes gallegos pelotudos que no entienden un choto tienen que esperar a que cargue la barrita abajo azul en el ordenador, ¿ordenador?, estúpido se llama computadora, la concha tu madre, esperá que cargue toda la barrita y ahí abre la página, no por que tengas 20 megas la barrita va a hacer así «chiun», no hace «fuuu», entendés, dale, ciao, ¡hasta luego!
Indignado consulto la página de internet de Jazztel y localizo sus teléfonos de atención. Llamo al 1565 en el que, como no soy cliente, no puedo contactar más que con el servicio comercial. De nuevo hablo con una teleoperadora (también con acento argentino) que no sabe (no puede, no quiere) pasarme con ningún responsable de ningún tipo. Simplemente me da el teléfono de atención al cliente (donde, como no soy cliente, no me atienden), un teléfono 902 para que me gaste el dinero y una dirección de correo electrónico.
Es decir, se pueden permitir tener a un montón de gente (incluso del otro lado del Atlántico) llamando sin cesar para hacer proposiciones comerciales, que yo no he solicitado, pero no pueden tener a nadie que sea responsable de dicho servicio ni que responda ante una situación de este tipo.
Para más inri, 10 minutos después vuelvo a recibir otra llamada (de un call center vecino) de otra señorita, con marcado acento argentino, que me vuelve a intentar colar la oferta del ADSL de 20 megas. Evidentemente le paro los pies antes de que me suelte la retaila robótica y le explico lo sucedido instantes antes con dos de sus compañeros. Ésta sí, muy amablemente, se disculpa personalmente y me informa de que no puede haber sido una llamada de su planta porque en ella sólo trabajan mujeres… Bueno, el caso es que me dice también que no puede hacer nada ni transferir mi llamada a nadie.
Lo dejo estar y comienzo a buscar información en la página de Jazztel. Encuentro otro número de Madrid. Llamo pero, evidentemente, es sábado y, aunque los teleoperadores de ultramar estén haciendo horas extras, aquí no hay nadie y la locución me informa de que su horario de oficina es de lunes a viernes.
Al rato llega mi novia. Repite la llamada al 1565 con la misma fortuna. Así que decidimos escribir un correo electrónico a la espera del lunes. Es decir, hoy.