La responsabilidad es el catalizador que fija las dinámicas más importantes de la sociedad.
Sin responsabilidad todo se diluye, todo produce la misma amalgama de desidia y desánimo por avanzar, por poner orden en los caos, por desarrollarse, por evolucionar.
Cuando los individuos dan la espalda a sus responsabilidades varias, niegan su propio papel en el mundo, en su mundo, en sus mundos. Dejan de tener sentido.
3 respuestas ↓
1 judith // 24 - abril - 2012 at 8:27 pm
Estoy de acuerdo… Pero ser responsable también es asumir que lo que somos es consecuencia de lo que hemos decidido ser y, a veces, hablo por mi, me crea angustia. Rechazar las falsas excusas es duro… a veces me es más fácil caer en la tentación de fluir en lo positivo y no ser esclava de mis creencias…
2 calamar // 24 - abril - 2012 at 11:20 pm
Responsabilidad y consecuencia… Evidentemente no se pueden separar. Ser responsable es tomar y asumir decisiones. Y defenderlas en el tiempo, claro está. Es complejo, nadie ha dicho que no lo sea.
Un antiguo jefe que tuve hace años solía decirnos «no sé cómo se hace, pero es fácil». Cabrón. Yo diría que esto es al revés: «sé cómo se hace, pero es difícil».
Gracias por el comentario y la reflexión.
3 Factura oficial… // 9 - junio - 2012 at 3:25 pm
[…] Más aún cuando se supone que regenta o atiende un negocio o se dedica a una profesión con cierta responsabilidad. Y dignidad. Pero estos últimos dos conceptos […]
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